En un futuro cercano en Brooklyn, David es un ejecutivo del mundo de la publicidad adicto al trabajo y a la tecnología, que vive envidiando la vida de su mejor amigo Wim. Se encuentra trabajando en la campaña de unas nuevas gafas de realidad virtual cuando decide usarlas para tener una
aventura con Sophie, la novia de Wim
al menos en su mente, pues solo se trata de una imagen creada por las gafas que le llevará a atravesar la fina línea entre lo real y lo virtual.