Una banda de traficantes que se dedica a prestar servicios a pedófilos alrededor del mundo ha comprado, en un pequeño pueblo pobre del Ecuador, un estudio de grabación de películas para adultos y un circo. Es así que abren una web denominada Casting Couch For Kids, donde ponen fotografías de los niños para que depravados decidan contratar los servicios de esta gente.