Dios está cansado. Ha sido un largo tiempo y ha decidido que merece, como el común de los mortales, unas buenas vacaciones, lejos de sus obligaciones. Como no se puede dejar de cumplir con sus obligaciones, en busca de un sustituto en Brasil. En los países de América va a buscar la ayuda de varios fieles que emprenderá un viaje para encontrar al candidato de Dios para cubrir su posición.