Una niña de cuatro años llamada Amanda, hija de una drogadicta, es secuestrada en uno de los barrios más conflictivos de Boston. Contratados por sus tíos, serán dos investigadores privados: Patrick Kenzie y Angie Gennaro con la colaboración de la policía, los encargados de estudiar los motivos de la desaparición y así conseguir dar con ella.