Bruno y Malik son dos amigos que han pasado los últimos veinte años viviendo en un mundo diferente: el de los niños y adolescentes autistas. Al frente de dos asociaciones sin ánimo de lucro, Bruno y Malik se dedican a formar a jóvenes de barrios marginales para que puedan llegar a ser cuidadores de casos extremos, que implican a niños que se encuentran en problemas.