Nick Keller (Til Schweiger, 'Malditos bastardos') es un joven de una
familia rica incapaz de mantener un trabajo. El joven respeta a su madre, que persistentemente cree que algún día, su hijo torpe e inepto va a cambiar y llegar a ser alguien. Las cosas parecen cambiar cuando Nick consigue un trabajo en una clínica psiquiátrica. Sin embargo, como en todos los trabajos anteriores, se termina de decir adiós. Justo el día irá, salva a una joven llamada Leila (Johanna Wokalek, 'RAF Facción del Ejército Rojo') de un intento de suicidio en el baño de mujeres. La historia de Leila también es compleja. Se pasaron los primeros diecinueve años de su vida encerrado en la casa de su madre. Después de su muerte, fue ingresada en la clínica. Mentalmente, Leila todavía un niño, y aborrece a ser tocado. Después de que el acto de su salvador, Leila se obsesiona con él, persiguiendo a la joven a su casa. Dadas las apariciones constantes de Leila, Nick decide llevarlo a la boda de su hermano.