Esta película que integra dos historias, comienza presentando un asesino a sueldo cansado de su oficina, llamado Wong Chi-Ming (Leon Lai), y una mujer ambigua que ejercen la prostitución a la que él llama "su socio" (Michelle Reis). Ellos son conocidos, pero han visto casi nunca, y sin embargo, ella es responsable de limpiar su apartamento sucio y enviarlo por fax planos de los lugares donde tiene que ir a la huelga turno. Ella está profundamente enamorada de él y frecuenta el bar va solo a sentarse en su asiento y fantasear. Una noche en un McDonald, Wong Chi-Ming Blondie conoce a una prostituta salvaje. Comienzan a buscar y crear sus propias ilusiones. El "socio" no va a ver esta relación con buenos ojos y cuando transfiere su deseo de dejar el cargo de asesino a sueldo, se sentirá herido y abandonado, ya que esto significa al mismo tiempo el fin de la relación que ambos mantuvieron.