Noche días 24 y 25 de agosto de 1944, el destino de París está en las manos del general alemán von Choltitiz, gobernador del Gran París, que se prepara para volar la capital, a la espera de órdenes de Hitler. Viniendo de una línea de sangre de militar prusiano nunca ha vacilado en obedecer órdenes. Y esto es una preocupación principal de la Nordling cónsul sueco mientras sube las escaleras del hotel Meurice secreto que conducen a las cámaras de la general. Los puentes del Sena, el Louvre, Notre Dame, la Torre Eiffel ... se ven socavados y listo para explotar. Nordling debe utilizar todas sus armas diplomáticos para convencer al General de no ejecutar una orden que conducirá a la destrucción una de las ciudades más bellas del mundo.