En Uganda la palabra "Kuchu" se utiliza para referirse a las personas de orientación homosexual. En ese país una fuerte persecución de este grupo y el gobierno de la misma amenaza de una "ley contra la homosexualidad", con la que muchas personas pueden dar a sus huesos en la cárcel o incluso ser condenados a muerte se ejerce. Es por eso que los pocos activistas por los derechos de gays y lesbianas de los países africanos son considerados insignias en favor de los derechos de hombre.En este contexto, David Kato alza la voz contra las represalias por parte del Estado de Uganda, la lucha con otros colegas de los derechos y libertades de estos así llamados "Kuchus".