Rachel es una mujer joven y bella que está casada con un mucho mayor que ella y, al mismo tiempo, de varios millones de dólares el hombre. El problema es que Rachel nunca se ha casado por amor, y ahora planea asesinar a su marido para quedarse con su fortuna sin tener que seguir más tiempo con él. Para ello, se recibe la ayuda de su amiga Carla, y ambos coinciden en que el plan debe ser perfecta para que nunca se ha caído en la policía. Sin embargo, surge el mayor inconveniente cuando el marido de Rachel contrata a un detective privado para supervisar las acciones de su esposa.