En el verano de los años 80, en una ciudad del interior de Inglaterra, dos niños totalmente diferentes tienen, sin embargo, algo en común: lo mucho que les fascina la figura de Rambo, el personaje interpretado por Sylvester Stallone. Uno es Will Proudfoot, huérfano de padre, es el hijo mayor de una
familia tradicional y religiosa que sigue normas muy rígidas de conducta.